"Lo único que se podía escuchar eran los tacos contra el piso de madera, sabia que estaba muy cerca y iba a volver a pegarme si hacia ruido, ya la había echo enojar mucho. Me acurruque contra la pared del baúl y comencé a llorar."
Me desperté sobresaltado, siempre era la misma estúpida pesadilla de la cual nunca me pude librar desde los 5 años y eso que ahora tenia 18, todos creían que se iban a ir con el tiempo pero no fue así. Estaba completamente mojado y sudando frió, lo cual para mi era totalmente normal. Cuando comencé a mirar alrededor note que estaba todo a oscuras ¿Por que todo estaba a oscuras? mi respiración comenzó a ser pesada, mi corazón empezó a latir mas y mas rápido y sabia que no podía moverme. Necesitaba salir de la habitación rápido, cerré los ojos y me dije:
-Tranquilo D. no pasa nada, todo esta bien. Levántate y ve afuera, vamos tu puedes.
Gracias a dios que conozco la casa y cada uno de sus muebles y rincones por que si no ya me hubiese roto algo. Bajo las escaleras, camino por el pasillo, estiro la mano y toco la manija de la puerta, la abro y salgo a fuera. Entonces caigo de rodillas, el aire ya casi no llega a mis pulmones y mi corazón esta demasiado acelerado, no puedo abrir los ojos el miedo que siento es mucho mas fuerte.
-Daemon ¿estas bien?
Esa voz hace que abra los ojos de golpe y la mire, esta parada en el césped del jardín delantero de mi casa. Corre hasta mi lado y estira la mano para tocarme, entonces hago un movimiento brusco y me alejo de ella.
-No.
Es lo único que puede decir, ella me mira y yo camino hasta la calle, miro al rededor y las únicas luces prendidas son las de la calle. Me concentro en ellas y en el aire fresco de la noche, entonces logro calmarme por completo, vuelvo a mirar al porche de mi casa y Molly esta sentada mirándome.
-¿Que haces Mol?
Le pregunto mientras me siento a su lado, ella tiene un pijama de conejitos que la hace ver muy adorable, pero tiene unas ojeras enormes y su cara de cansancio me dice todo.
-No podía dormir, después se corto la luz, me sentía sola y quería saber si...
Deja la frase en el aire y sonrió. Entonces me llevo los dedos a la boca y silbo. Enseguida aparece mi golden retriever moviendo la cola, ella esta fascinada con mi cachorro desde hace 1 año que fue cuando me lo compre.
-Brutus, sentado.
El hace lo que le digo y ella sonríe. Me agacho para acariciarlo y el me lame la mejilla.
-Hoy iras a cuidar a Molly, Brutus. No te vallas, no rompas nada y compórtate a la tarde voy por ti.
El ladra y se sienta al lado de Mol.
-¿Vas a estar bien?
Se que se refiere a lo de recién.
-Si, solo fue un ataque.
Ella me mira sin entender y suspiro.
-No puedo estar en la oscuridad o en lugares cerrados por que sufro ataques de pánico, mi psicólogo dicen que son secuelas de mi infancia. Ahora Mol ve a tratar de dormir algo. Brutus te cuidara.
Ella le acaricia la cabeza al perro y se va a su casa, yo camino hasta el fondo de mi casa y me siento para ver si puedo descansar algo. Entonces recuerdo todo lo de la tarde anterior y me deprime, todavía no acepto que Margaret halla muerto, el mundo no es justo con algunas personas. Yo soy un ejemplo claro, al igual que Mar nunca le desee el mal a nadie ni siquiera cuando era un niño que no tenia con quien jugar, pero parece que el estúpido mundo siempre estuvo en mi contra. Recuerdo que cuando tenia 5 y llegue al orfanato, nunca tuve un amigo los niños no se acercaban y murmuraban cosas entre ellos. A veces siento como si fuera letal o algo peligroso, radiactivo, por que todo lo que se acerca a mi corre peligro, muere o sale lastimado, sufro mi propio infierno desde que tengo noción del tiempo y ahora tengo que mantener alejada a Molly de mi, no soportaría que ella sufriera otra vez por mi culpa. Pero ella esta sola ahora, no tiene a nadie al igual que yo y no se si tengo la fuerza suficiente como para alejarla de mi.
Hace un año cuando a Margaret le diagnosticaron cáncer y vino a contarme, llore todo un día encerrado en mi habitación, claro que no iba a dejarla que me vea así por que ella era alguien fuerte y sabia que iba a poder salir de eso. Molly se entero mucho tiempo después, cuando Mar comenzó a empeorar y notaron que definitivamente la quimioterapia no funcionaba. Recuerdo que ella estuvo llorando por una semana insultando a todos, no fue al colegio y no salia de su habitación, estaba sin comer y no dejaba que entre nadie. Mar me busco y se sentó conmigo en la hamaca de madera del patio trasero de mi casa para contarme como ella se sentía con lo que estaba pasando y para decirme que Mol no estaba aceptando que su madre tarde o temprano se iría, entonces me dijo si yo podía hacer algo. Dos días después estaba parado en la puerta de su habitación con el que ahora es mi golden en brazos, el solo era un cachorro tan chiquito y adorable que Mol lo iba a amar.
-Mol ¿quieres ver algo que me compre?
Le dije, se escuchaban ruidos del otro lado y después nada.
-¿Que es?
Dijo después de un rato, su voz sonaba ronca de tanto llorar.
-Tienes que verlo por ti misma.
Ella abrió la puerta lentamente y abrió los ojos como platos.
-ES UN GOLDEN.
Se puso a gritar haciendo que el cachorro se despertara de entre mis brazos y casi pegara un salto. Lo acaricie y ella vino a mi lado.
-¿Te gusta?
-Es hermoso ¿como lo llamaras?
-No se ¿Quieres ponerle tu el nombre?
-¿Lo dices enserio?
-Claro.
Se quedo pensando un rato y después me dijo:
-Brutus.
-¿Brutus?
-Sip.
-Bueno, sera Brutus ¿quieres que lo saquemos a pasear?
-Claro, iré a cambiarme.
Mar estaba mas que feliz de que su pequeña saliera al aire libre conmigo, ella me conocía perfectamente y esa fue la única vez que salí con Mol, después ella iba a veces a ver a Brutus pero nunca cambia mas de dos palabras conmigo y yo cada vez me iba enamorando mas y mas de ella. No es como si me fuera a atrever alguna vez a decírselo, ella solo necesitaba a alguien por ahora. Luego todo iba a volver a la normalidad y yo volvería a estar tan solo como siempre.
viernes, 18 de abril de 2014
VIDA
Hola chicos, a los que me leen quiero contarles que estoy escribiendo una nueva historia que es la siguiente, se llama VIDA o por ahora va a ser así. ¡Espero les guste y no les confunda que suba junto con la historia de Meg y Dylan. Gracias y besos miles!
Había algo en los funerales que no era total y completamente de mi agrado, simplemente los odie toda mi vida. Estaba concentrado mirando el pasto verde mientras esperaba que todos se acomodaran, me había sentado en la 3ra fila sin poder ir hasta la 1ra, era demasiado para mi. Entonces un hombre que se presento como el "Pastor Phill" empezó a despedir definitivamente a Margaret, siguió hablando por un rato y fue cuando me canse de escuchar. Mire a las hileras de sillas del otro lado del ataúd cerrado y estaba toda su familia, sus 4 hijas, su único hijo varón y su ex esposo por con su nueva mujer. Todos lloraban desconsoladamente y hice rodar los ojos, mire a las hijas mayores de Mar, Liby y Lili que eran gemelas, abrazadas y consolándose entre ellas; seguí mirando y estaba Charlott la que le seguía a las gemelas junto a Ben, que tenia los ojos rojos y hinchados de tanto llorar. Luego estaba Bob el ex esposo y ex padre, con su nueva esposa o mejor dicho por la cual traiciono y abandono a todos, Laura con un pañuelo en la mano y una cara demasiado seria. Entonces mis ojos se posaron completamente en Molly, la mas chica de los 4 hermanos, ella era hermosa, dulce y sincera con todo el mundo, raramente se la veía mal o sin sonreír. Hoy no era el día de las "no sonrisas" precisamente, es mas, sonreía abiertamente como si algo le pareciera super gracioso lo cual me sorprendió mucho por que ella era la mas unida con Margaret, la que siempre había estado en todos y en cada momento. Pero vi algo en sus ojos que no era dolor, si no odio, ella miraba con odio a sus hermanas, hermano y su padre; lo cual no entendí pero no juzgue, ella estaba pasando un horrible momento era entendible que quiera matar a alguien, yo quise hacerlo por unos 2 años y solo tenia cinco. El pastor termino y dijo que si alguien quería decir unas palabras lo podía hacer, nadie dijo nada y dudaba que respiraban, entonces Mol se levanto. Se aliso su vestido negro de encaje que le llegaba arriba de la rodilla y camino con sus enormes tacos con plataformas, se escucho cinco horribles "Clac" que fueron sus zapatos contra el suelo de madera del pequeño escenario, había algo en los tacos chocando contra la madera que me desesperaba pero lo aparte de mi mente rápido. Ella sonrió enormemente y todos la miraban extrañados, entonces golpeo con dos dedos el micrófono, se aclaro la garganta y con una voz demasiado angelical dijo la mejor frase que nunca pensé escuchar en un funeral, menos en el de su propia madre:
-Ojala se pudran todos en el maldito infierno.
Sonrió aun mas y vi como baja por el lado contrario al que había subido, miro a un chico en la primera fila que no reconocí y le saco la rosa blanca de las manos murmurando demasiado alto:
-Idiota.
Levanto la vista y me miro directamente a los ojos, por primera vez en años vi algo roto y demasiado triste dentro de ella. Como si con una simple mirada y una sonrisa triste me hubiera dejado ver una parte de su alma. Se dio vuelta, se agacho cerca de la tumba y dijo:
-Mami, tienes suerte que estos idiotas no te molesten mas.
Apoyo suavemente la rosa en el cajón, se levanto con todo su orgullo y camino por el pasillo entre las sillas hacia los autos, justo cuando creí que todo había terminado de su parte, ella paro y me miro:
-Daemon.
Dijo, la forma en que dijo mi nombre o incluso que supiera mi nombre me hizo sentir en las nubes, pero claro cada vez que podía pasaba tiempo con su madre al menos mi nombre lo sabia. La mire a los ojos y sonrió.
-¿Vienes?
Asentí y me levante, todo el mundo nos estaba mirando. Llegue a su lado y ella me tomo de la mano, sentí como una descarga de electricidad corría justo en donde ella me tenia agarrado supongo que ella también lo sintió por que miro nuestras manos y negó con la cabeza sonriendo, entonces empezó a tirar suavemente de mi hasta que llegamos a su auto.
-¿Esa fue una retirada épica no crees?
-Claro que si.
Le dije sonriendo, yo estaba enamorado de Molly desde que me había mudado justo al lado de su casa hace 5 años y la vi como miraba desde el porche de su casa a su madre que había venido a darme las bienvenidas en el barrio a mi y a mi familia, recuerdo que me puse muy mal y le explique que era huérfano y siempre lo había sido al menos hasta los cinco años, tenia leve recuerdos que eran mis pesadillas pero siempre estuve solo y por que tuviera solo 14 años no quería decir que viviera totalmente solo, tenia un tutor no tan tutor que me "cuidaba" pero como mis padres me habían dejado una cuenta con dinero lo cual agradezco, pude vivir bien. Ella casi rompe a llorar, entonces me sorprendió abrazándome y dijo que nada malo pasaría que podía contar con ella para lo que fuera. Amaba a Margaret, era la madre que nunca tuve, por eso cuando me entere que tenia cáncer de pulmón pensé que el mundo era demasiado injusto para algunos, como para ella o como para mi. Pero la vida es así, solo hay que vivirla esas cosas improvisadas que ocurrían todo el tiempo ya no me sorprendían, lo que me sorprendió es que Molly supiera que existo, que este justo ahora a mi lado y que solo a mi me deje verla llorar.
Aparco el auto al borde de la carretera y apoyo la cabeza en el volante, no sabia que hacer, nunca me habían consolado y creo que no tenia ni idea de que hacer. Entonces estire mi mano y le acaricie la espalda, lo que hizo que llore mas y se mueva hasta quedar abrazada a mi, con su cara en mi cuello. Luego de media hora, escuche como su respiración se regularizo y mire hacia bajo, estaba dormida, era realmente lo mas lindo que había visto en mi vida.
-Gracias.
Murmuro casi inaudible.
Había algo en los funerales que no era total y completamente de mi agrado, simplemente los odie toda mi vida. Estaba concentrado mirando el pasto verde mientras esperaba que todos se acomodaran, me había sentado en la 3ra fila sin poder ir hasta la 1ra, era demasiado para mi. Entonces un hombre que se presento como el "Pastor Phill" empezó a despedir definitivamente a Margaret, siguió hablando por un rato y fue cuando me canse de escuchar. Mire a las hileras de sillas del otro lado del ataúd cerrado y estaba toda su familia, sus 4 hijas, su único hijo varón y su ex esposo por con su nueva mujer. Todos lloraban desconsoladamente y hice rodar los ojos, mire a las hijas mayores de Mar, Liby y Lili que eran gemelas, abrazadas y consolándose entre ellas; seguí mirando y estaba Charlott la que le seguía a las gemelas junto a Ben, que tenia los ojos rojos y hinchados de tanto llorar. Luego estaba Bob el ex esposo y ex padre, con su nueva esposa o mejor dicho por la cual traiciono y abandono a todos, Laura con un pañuelo en la mano y una cara demasiado seria. Entonces mis ojos se posaron completamente en Molly, la mas chica de los 4 hermanos, ella era hermosa, dulce y sincera con todo el mundo, raramente se la veía mal o sin sonreír. Hoy no era el día de las "no sonrisas" precisamente, es mas, sonreía abiertamente como si algo le pareciera super gracioso lo cual me sorprendió mucho por que ella era la mas unida con Margaret, la que siempre había estado en todos y en cada momento. Pero vi algo en sus ojos que no era dolor, si no odio, ella miraba con odio a sus hermanas, hermano y su padre; lo cual no entendí pero no juzgue, ella estaba pasando un horrible momento era entendible que quiera matar a alguien, yo quise hacerlo por unos 2 años y solo tenia cinco. El pastor termino y dijo que si alguien quería decir unas palabras lo podía hacer, nadie dijo nada y dudaba que respiraban, entonces Mol se levanto. Se aliso su vestido negro de encaje que le llegaba arriba de la rodilla y camino con sus enormes tacos con plataformas, se escucho cinco horribles "Clac" que fueron sus zapatos contra el suelo de madera del pequeño escenario, había algo en los tacos chocando contra la madera que me desesperaba pero lo aparte de mi mente rápido. Ella sonrió enormemente y todos la miraban extrañados, entonces golpeo con dos dedos el micrófono, se aclaro la garganta y con una voz demasiado angelical dijo la mejor frase que nunca pensé escuchar en un funeral, menos en el de su propia madre:
-Ojala se pudran todos en el maldito infierno.
Sonrió aun mas y vi como baja por el lado contrario al que había subido, miro a un chico en la primera fila que no reconocí y le saco la rosa blanca de las manos murmurando demasiado alto:
-Idiota.
Levanto la vista y me miro directamente a los ojos, por primera vez en años vi algo roto y demasiado triste dentro de ella. Como si con una simple mirada y una sonrisa triste me hubiera dejado ver una parte de su alma. Se dio vuelta, se agacho cerca de la tumba y dijo:
-Mami, tienes suerte que estos idiotas no te molesten mas.
Apoyo suavemente la rosa en el cajón, se levanto con todo su orgullo y camino por el pasillo entre las sillas hacia los autos, justo cuando creí que todo había terminado de su parte, ella paro y me miro:
-Daemon.
Dijo, la forma en que dijo mi nombre o incluso que supiera mi nombre me hizo sentir en las nubes, pero claro cada vez que podía pasaba tiempo con su madre al menos mi nombre lo sabia. La mire a los ojos y sonrió.
-¿Vienes?
Asentí y me levante, todo el mundo nos estaba mirando. Llegue a su lado y ella me tomo de la mano, sentí como una descarga de electricidad corría justo en donde ella me tenia agarrado supongo que ella también lo sintió por que miro nuestras manos y negó con la cabeza sonriendo, entonces empezó a tirar suavemente de mi hasta que llegamos a su auto.
-¿Esa fue una retirada épica no crees?
-Claro que si.
Le dije sonriendo, yo estaba enamorado de Molly desde que me había mudado justo al lado de su casa hace 5 años y la vi como miraba desde el porche de su casa a su madre que había venido a darme las bienvenidas en el barrio a mi y a mi familia, recuerdo que me puse muy mal y le explique que era huérfano y siempre lo había sido al menos hasta los cinco años, tenia leve recuerdos que eran mis pesadillas pero siempre estuve solo y por que tuviera solo 14 años no quería decir que viviera totalmente solo, tenia un tutor no tan tutor que me "cuidaba" pero como mis padres me habían dejado una cuenta con dinero lo cual agradezco, pude vivir bien. Ella casi rompe a llorar, entonces me sorprendió abrazándome y dijo que nada malo pasaría que podía contar con ella para lo que fuera. Amaba a Margaret, era la madre que nunca tuve, por eso cuando me entere que tenia cáncer de pulmón pensé que el mundo era demasiado injusto para algunos, como para ella o como para mi. Pero la vida es así, solo hay que vivirla esas cosas improvisadas que ocurrían todo el tiempo ya no me sorprendían, lo que me sorprendió es que Molly supiera que existo, que este justo ahora a mi lado y que solo a mi me deje verla llorar.
Aparco el auto al borde de la carretera y apoyo la cabeza en el volante, no sabia que hacer, nunca me habían consolado y creo que no tenia ni idea de que hacer. Entonces estire mi mano y le acaricie la espalda, lo que hizo que llore mas y se mueva hasta quedar abrazada a mi, con su cara en mi cuello. Luego de media hora, escuche como su respiración se regularizo y mire hacia bajo, estaba dormida, era realmente lo mas lindo que había visto en mi vida.
-Gracias.
Murmuro casi inaudible.
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